Loki, el vikingo aventurero

    De pronto salió el sol y los cuatro empezaron  a ordenar el barco. Izaron de nuevo las velas y volvieron a navegar. De repente apareció delante de ellos un barco de crucero lleno de turistas que, asomados a la barandilla, no paraban de hacerles fotos con sus móviles.

 

 Loki, el vikingo aventurero

    En Boca Lofa, una isla del mar del Norte, vivía un vikingo llamado Loki, que significa Dios tramposo. Su sueño era navegar para conocer otras islas. Loki es un vikingo como los de las películas, alto y fuerte. Es pelirrojo y con ojos verdes. Lleva siempre su casco de cuernos de color plateado porque piensa que le da suerte. Nunca se olvida de su hacha de doble hoja que siempre la lleva afilada.

    Loki quería conocer otros países y a otras personas.Para abandonar la isla y poder llevar a cabo su aventura necesitaba construir su propio barco. Como no podía hacerlo solo, buscó a sus tres mejores amigos: Hans, Olav y Odín. Les contó su plan y los tres decidieron ayudarle e irse con él para vivir esa aventura.

    Talaron árboles para conseguir madera. Buscaron telas para confeccionar las velas. Buscaron cuerdas y confeccionaron remos. Estuvieron trabajando de sol a sol durante un mes hasta que el barco estuvo terminado.

    El 30 de junio decidieron embarcar e iniciar su viaje. Los cuatro estaban muy contentos y motivados. En seguida surgió el primer problema ¿hacia dónde se dirigían? Como no se ponían de acuerdo, decidieron izar las velas y que el viento decidiese. Pasadas tres horas, seguían en el mismo sitio ya que no soplaba el viento.  Empezaban a tener hambre y decidieron ponerse a pescar. No picaba ni un solo pez. De repente, aparecieron tres horcas que se dirigían a ellos peligrosamente. En ese momento empezó a soplar el viento y consiguieron huir.

    Estaban ya más tranquilos y decidieron abrir unas latas de espinacas para comer. Justo se habían sentado cuando estalló una gran tormenta. El oleaje hacía peligrar el barco que empezó a moverse a la deriva.  Los cuatro estaban aterrorizados. La tormenta duró quince minutos pero a ellos se les hizo una eternidad.

    Loki y sus amigos, un poco agobiados, vieron a lo lejos una isla y decidieron acercarse a ella. Según se iban acercando vieron que era su preciosa isla. Como su aventura no había salido como ellos pensaban decidieron no volver a intentarlo  y se quedaron en Bocalofa con su tranquila vida.

FIN DEL VIAJE DE LOKI

Aarón Echeverría